El bosque de Gulubú

El bosque de Gulubú
Sarah Preston

"¿Ustedes vieron esos libros-sorpresa que cuando uno los abre aparecen figuritas de pie?

Bueno, igualito es el bosque de Gulubú. Como las marionetas dormidas. Uno le tira de los hilos y ellas se ponen de pie, bailan y se mueven.

El bosque de Gulubú está planchado en el suelo, y cuando su dueño tira de los alambres, los árboles y los yuyos y las casitas y los bichos aparecen todos como diciendo:

Aquí estamos. Estábamos jugando a la escondida. "(...)


"Por eso, si ustedes alguna vez encuentran detrás de un árbol, o detrás de cualquier cosa, a un inspector enanote y sabihondo que les dice que no es posible que existan un enanito y 7 Blancanieves, o que no es posible que exista cualquier cosa linda, ustedes pueden contestarle:

–Sí señor, existe, en el bosque de Gulubú."


Dailan Kifki

Maria Elena Walsh






domingo, 30 de junio de 2013

Con las manos en la masa


Duende marinero
con balde y palita,
vamos a la playa
de arena y harina.

Húndete en el pozo,
trepa a la colina,
baja por la cuesta,
pincha que te pincha.

Una nube blanca
cayó en la cocina:
la recogeremos
con la cucharita.



"Canción para comer puré"
María Elena Walsh


Jugar con harina, o con una masa de harina y sal es sencillo y da para mucho. En este caso surgió un restaurante-pizzería, y según la edad fue una actividad sensorio-motora, de juego simbólico, o creativa...o una mezcla de todas. 


preparándonos para empezar

estiramos

pinchamos

 en toda cocina alguien tiene que ocuparse de los cacharros
También me dejaron tocar la masa

eso sí,  muy vigilado porque me la quería comer
 

Mucha actividad y concentración...





Y a servir la mesa...




Pero, un momento, ¿era un restaurante o un circo?

malabaristas
artistas

¡ Y equilibristas!


Ah! y también un domador de fieras



 La receta:

- Dos medidas de harina
- Una de sal
- Una de agua
Amasar hasta que quede elástica, se puede guardar en la nevera, hornear o dejar secar y pintar.


Jugar con harina puede ser una experiencia fascinante, pero es una buena idea restringir el juego a una zona limitada de la casa...

https://youtu.be/FjDb0pJCoNE

lunes, 24 de junio de 2013

Cosas chiquitas. Lo que hacen las madres


Son cosas chiquitas.
No acaban con la pobreza
no nos sacan del subdesarrollo,
no socializan los medios de producción
y de cambio, no expropian las cuevas de Alí Babá.

Pero quizá desencadenen la alegría de hacer,
y la traduzcan en actos.
Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad
y cambiarla aunque sea un poquito,
Es la única manera de probar
que la realidad es transformable.

Eduardo Galeano



Lo que hacen las madres también son cosas chiquitas, que parecen invisibles y sin embargo transforman la realidad.
Pensando en lo que cuesta que se reconozca y se valore el trabajo de las madres de día me dí cuenta que esa dificultad es fruto del poco reconocimiento social de lo que hacen las madres.

 
El otro día la mamá de uno de los bebes que viene al bosque de Gulubú, me lo trajo dormido abrazadito a su madre en la mochila. Se desajustó la mochila y con mucho cuidado para que no se despertara yo me calcé la mochila y me lo pasó. Me senté con cuidado en la butaca y me quedé mirándolo, sintiendo su respiración en mi pecho, intentando que mi respiración también fuera pausada y relajada para tranquilizarlo y que su descanso no fuera interrumpido. Su mamá se fue a trabajar. Y estando así tuve la tentación de pensar que debería aprovechar el tiempo, que no estaba haciendo nada yo. Me acordé entonces de un libro que estuve leyendo hace poco: Lo que hacen las madres sobre todo cuando parece que no hacen nada, y me dí cuenta que lo que estaba haciendo es importante, no se ve, no estoy produciendo nada, ....Pero es muy valioso, muy importante para ese bebé y para la sociedad de la que forma parte.


Las madres de día asumimos lo que parecería un doble papel, el de educadora y cuidadora o madre, pero en realidad no se puede separar. Es indispensable crear un vínculo afectivo y proporcionar, calor, amor, seguridad, alimento e higiene en la misma medida que un espacio diseñado para explorar libremente, un material rico y variado y un acompañamiento respetuoso. Consolamos, nos preocupamos y estamos alertas y atentas como una madre; pensamos y diseñamos material de juego, los observamos, los acompañamos,...Los cuidados maternales se funden con el acompañar sus aprendizajes.
Pero nos encontramos con la misma incomprensión que las propias madres en nuestro trabajo diario. En parte porque nuestra profesión no está reconocida ni regulada pero también porque la maternidad no está valorada.



Por un lado está la sensación de aislamiento, al estar sola en casa, a veces parece que vives en un mundo paralelo. Y después está la necesidad de demostrar lo que haces, lo que produces....y eso no es tan fácil de mostrar porque hay cantidad de cosas que hace una madre que ni siquiera existe un lenguaje para nombrarlas. Naomi Stadlen* lo explica muy bien en su libro y a través de la experiencia de cientos de madres saca a la luz esas cosas chiquitas tan importantes que hacemos las madres. Una de ellas es el consuelo:

El consuelo humano es una de las mejores fuerzas que podemos ofrecernos unos a otros. Se puede dar de forma casual con una sonrisa, una caricia, unas pocas palabras, incluso por el silencio. Sin embargo, es muy eficaz. No suele alterar la causa de nuestros problemas, pero hace que nos sintamos más capaces de enfrentarnos a ellos.

Muchas madres consuelan a sus bebés cuando lloran, aunque eso suele pasar desapercibido.

Las teorías para afrontar esta situación suelen centrarse en la técnica. Sin embargo, para responder a un bebé que llora hace falta algo más que técnica. Por detrás de lo que hace una madre se encuentra su visión de la naturaleza humana. Aunque no sea consciente de ello, influye en muchas de la decisiones rápidas que debe tomar. Básicamente puede pensar que su bebé es bueno, en cuyo caso confía en él, o verle como resultado de la maldad humana o del pecado original, lo cual la obliga a formarle. Esto supone una gran diferencia.

La madre que confía en su bebé le cogerá y le tendrá cerca de ella. La que ve el llanto de su bebé como una necesidad de formarle mantendrá cierta distancia.



Cuando una madre consuela no está intentado cambiar el comportamiento de su bebé, ni apaciguarlo, lo que ofrece va mucho más allá , y tiene que ver también con sus creencias sobre la naturaleza humana y con la capacidad para empatizar con el bebé.

Una parte importante del consuelo depende de que la madre considere razonable la angustia de su bebé. Eso le permite tratarle con respeto. Aunque no comprenda por qué está llorando, confía en él. No intenta negar su malestar o librarse de un "ruido sin sentido". Se compadece realmente de él y quiere ayudarle.
 
He buscado documentación sobre el consuelo, pero hay muy poco material disponible. Se han escrito varios estudios sobre cómo "apaciguar" a los bebés. Pero esto significa ayudarles a dejar de llorar. El consuelo va más allá. La madre no sólo intenta cambiar el comportamiento de su bebé. Siente compasión por su angustia y hace todo lo posible para reconfortarle. La palabra reconfortar se deriva del latín fortitud,que significa "fuerza". Las madres utilizan su compasión para ayudar a sus hijos a sentirse fuertes.



El hecho de ser consolado es importantísimo para el bebé, pero no sólo para él:
 
El mundo se beneficia de la sensibilidad y la compasión de las madres. Una madre puede encontrarse fijándose continuamente en las injusticias del mundo que la rodea. Desde que se ha convertido en madre las percibe con más intensidad. Las voces compasivas suelen ser más suaves, aunque lo que digan resulte desconcertante.


Y lo que aprende el bebé:

Aunque el niño sea pequeño, la calidez de sus gestos suele tener el poder de consolar realmente. Su consuelo no se puede considerar oportunista. No espera nada a cambio;  simplemente está devolviendo algo que ya ha recibido. Ha aprendido de su madre que el consuelo humano puede ser muy bueno.

  


El estado de alerta, la capacidad para  interrumpir constante e immediatamente lo que está haciendo para atender al bebé, la preocupación, la atención:


Los logros maternales suelen pasar inadvertidos. Si no hay palabras para describirlos, ¿cómo podemos reconocerlos? (...) El lenguaje puede ser muy claro y preciso para explicar cualquier cosa práctica. Una persona que ha limpiado tiene las palabras adecuadas y una zona limpia para demostrarlo. Es mucho más difícil encontrar una palabra para describir el tipo de atención que una madres presta a su bebé. En muchos casos ni siquiera hay un cambio evidente en el bebé que pueda confirmar lo que ha hecho.

Los logros más maternales se suelen considerar un fracaso. "Preocuparse" es un buen ejemplo. La mayoría de las madres se preocupan. Pero ¿qué hace en realidad cuando está preocupada? Por ejemplo, si su bebé no deja de llorar, puede comenzar a pensar de una forma activa. Puede escuchar y observar cómo llora dejando a un lado sus propias suposiciones. Puede intentar comprender cómo se siente. Puede justificar su comportaminto con explicaciones que ha leído en alguna parte. Puede recordar algo que leyó hace muchos años y había olvidado hasta ese momento.

En otras palabras, puede pensar con rapidez en una gran variedad de posibilidades. Puede acabar con una idea bastante clara de por qué llora su bebé.




La capacidad de estar atenta y comprender un nuevo lenguaje no verbal y la enorme responsabilidad que conlleva la crianza:

 
La palabra "responsable" proviene de "responder", y esto es precisamente lo que hace una madre. Aprende a responder a su bebé. En la mayoría de las relaciones esto se hace con palabras. Tener que observar y escuchar las "señales" no verbales de un bebé puede resultar muy extraño. Con el tiempo es cada vez más fácil. Pero al principio suele exigir un nuevo estilo de comunicación.



Y qué importancia tienen esas cosas chiquitas que las madres hacen sin que nadie aprecie:


Una madre no vive en un vacío  social. No está simplemente luchando con su propia autoestima, como parecen pensar algunos. Un bebé es mucho más que su empresa privada. No es un hobby para su tiempo libre. Está criando a un nuevo miembro de nuestra sociedad.

Históricamente siempre ha habido madres que han pagado por cuidar a sus hijos, por lo general en casa. Sin embargo, hoy en día la mayoría de las madres trabajan lejos de sus bebés, y por lo tanto necesitan que alguien los cuide."Te volverías loca si te quedaras en casa sola con tu bebé", suelen decir. Y en parte tienen razón .Puede ser terrible cargar con una responsabilidad tan pesada con tan poco reconocimiento por parte de los demás. Se habla mucho del daño que una madre puede hacer a su hijo, pero no de lo que hace bien. Sin duda alguna lo bueno que haga le durará a su hijo toda su vida. ¿Por qué no se dice esto con más frecuencia?

Tampoco está aislada del resto de la sociedad. La gente supone a veces que si una madre no se gana la vida, está de algún modo "fuera" de a sociedad, sin un papel socia. Sin embargo, las madres tienen un papel social muy preciso. como no hay una palabra para él, no suelen reconocerlo. No son conscientes de con cuánta frecuencia lo desempeñan y se plantean si lo están haciendo bien. Son intermediarias. Se relacionan tanto con sus hijos como con los demás. En muchos casos tiene que explicarles a sus hijos situaciones sociales sutiles con un lenguaje sencillo. Pero a veces también se encuentran explicándose y pidiendo disculpas a otras personas por ellos.



Por todo eso, para que el trabajo de las madres de día sea valorado, hay que empezar por visibilizar y revalorar el trabajo de las madres. El primer paso es ser conscientes nosotras mismas de todo lo que estamos haciendo cuando parece que no hacemos nada y de lo importante que es no sólo para nuestro bebé si no para el conjunto de la sociedad. 
Las madres de día estamos luchando por el reconocimiento de nuestra profesión pero esa lucha va de la mano del reconocimiento del valor social de la maternidad y del derecho del niño a recibir cuidados maternales, especialmente en la primera infancia cuando estos cuidados no pueden restringirse a un horario.

En el fondo sabemos que un bebé necesita a su madre y que ésta es capaz de reconfortarle al instante, pero esta pequeña acción junto a otras muchas que también pasan desapercibidas constituyen para ese bebé una base de seguridad y de afecto a través de la cual interpretará, reinterpretará y creará su mundo.






*Naomi Stadlen, reconocida psicoterapeuta y madre de tres hijos, empezó a interesarse en el tema de la maternidad a raíz de colaborar con varios grupos impulsores de la lactancia materna y descubrir que el tema llegaba mucho más lejos que la simple alimentación. Lleva doce años dirigiendo un grupo de apoyo a las madres, Mothers Talking, en su país de origen, Inglaterra, y otros tantos ofreciendo su consejo a madres y padres de hijos pequeños.
Fruto de cientos de conversaciones con madres de edad y procedencia diversa, ha publicado Lo que hacen las madres.

http://www.naomistadlen.com/
http://anayoctavio.typepad.com/blog/2009/04/naomi-stadlen-terapeuta-las-mujeres-de-hoy-no-fueron-educadas-para-ser-madres.html

jueves, 13 de junio de 2013

Amar la trama

Ir y venir, seguir y guiar, dar y tener, entrar y salir de fase,
amar la trama más que el desenlace,
amar la trama más que el desenlace,
amar la trama más que el desenlace.
Por ahí como en un film de Eric Rommer,
sin esperar que algo pase,
amar la trama más que el desenlace. 

Jorge Drexler 



Amar la trama es un palíndromo que utiliza Drexler en una de sus canciones y que a mí me parece que sirve muy bien para explicar el enfoque pikleriano, una crianza slow, el respeto por los procesos de cada niño, en definitiva una manera de entender la vida y la crianza.

Ya hablé sobre la libertad de movimiento, la importancia de no interferir y no adelantar la adquisición de posturas hasta que el bebé esté preparado. Y estará preparado cuando por sí mismo las adquiera. ( Ver Cuestión de actitud. El derecho a gatear).





Amar la trama más que el desenlace es disfrutar de cada fase sin apurarla, vivir el momento, no querer saltarnos etapas y sobre todo dejar que ellos sean los protagonistas de su desarrollo, sin pretender dirigirlo desde una supuesta superioridad. 

Les comparto este texto de Melina Bronfman* que nos describe muy bien qué es el enfoque pikleriano:




"Emmi Pikler constató a través de múltiples observaciones (que más tarde devinieron en investigaciones de carácter único) que los niños desarrollaban su motricidad de manera personal, en una evolución constante y exquisita, en donde cada logro “corporal” era sólo la cara visible de la construcción del ser en su totalidad. Un niño que conoce muy bien dónde está, con quién, que no tiene ninguna preocupación, que es feliz, por el solo hecho de existir, que no siente que debe complacer a nadie, ni “portarse” de determinada manera, no tiene distracciones de su verdadero trabajo y sólo se ocupa de desarrollar su potencial al máximo.





PIkleriano significa entonces un gran conocimiento por parte del adulto de las etapas de desarrollo de un niño durante el periodo primal, en todos sus planos: emocionales, físico-fisiológicos, cognitivos. Y a su vez un enorme respeto por el desarrollo progresivo y personal, y el interés que cada niño manifiesta durante el mismo.

Pikleriano implica brindar un espacio en donde esto pueda ocurrir, sin obstaculizadores de ninguna clase. Ni en la vestimenta, ni en los elementos, muebles, juguetes (ni siquiera la vajilla), ni el entorno lumínico-sonoro.




Representa un adulto entendiendo el punto de vista del niño, un adulto que no procura obtener un resultado, sino que se enfoca en el interés y capacidades del niño y en su “aquí y ahora”.

Pikleriano a su vez no es dejar al niño hacer lo que desee mientras uno sea amable con él. También incluye la visión que el adulto tiene del niño. Brindar un encuadre de acción y de intercambio con pares en donde desarrollar el potencial al máximo no signifique transitar caminos riesgosos, lastimarse o lastimar a otros. La anticipación ante situaciones potencialmente peligrosas, y la asistencia al niño cuando las atraviesa (por ejemplo cuando aprende a subir y bajar las escaleras) sin interrumpirlo pero tampoco exponiéndolo a riesgos evitables."


* Melina Bronfman es Musicoterapeuta, Terapeuta corporal (Eutonista) y Doula. Se capacitó en el Instituto Pikler Lóczy en 5 oportunidades accediendo a los módulos sobre educación y desarrollo 1 y 2, juego, límites sin violencia y enfoque familiar. 
Pueden leer el artículo completo aquí.

Los 7 principios clave de Magda Gerber**:


1.    Presta completa atención a las actividades que realiza tu bebé: el 100% de atención nos enfoca de tal manera que los bebés reciben e interpretan esto como la encarnación del amor, el respeto hacia sus actividades.

2.    Reduce la velocidad: Brinda un ambiente de paz y tranquilidad a tu bebé. Saltar de una tarea a otra produce stress en el cuidador e irritabilidad en el bebé.

3.    Genera y relaciónate con confianza durante todo el tiempo que cuidas al bebé: durante las actividades de rutina (cambiar pañales, alimentarlo, bañarlo y vestirlo) convierte a tu bebé en un socio activo, explicándole qué vas a hacer, por qué y para qué con un lenguaje de respeto.

4.    “Con”, no “para”: establece una relación cooperativa con tu bebé. Dale la oportunidad de hacer las tareas CONtigo, no PARA él.

5.    Bríndale libertad de circulación: un bebé se convierte en prisionero de su propio cuerpo cuando no tiene espacio para moverse. Voltearse, arrastrarse, sentarse, pararse y caminar, no es sólo ejecutar movimientos, es aprender a hacer algo por su cuenta, a interesarse, probar,  experimentar, a superar las dificultades, a conocer la alegría y la satisfacción que se deriva de este éxito… el resultado de su paciencia y persistencia.

6.    Permítele jugar sin interrupciones: el bebé no necesita que lo “entretengas” Si le permites moverse él puede jugar por sí mismo. Jugar ininterrumpidamente le permitirá experimentar la independencia y el dominio de su mundo. Es aquí donde se está produciendo los inicios de la autoestima y la confianza.

7.    Conéctate y respeta las señales de tu bebé: cuando rechaza algo con su cuerpo no lo ignores, acepta su decisión. Los bebés devuelven todas las conductas que reciben de los adultos, así que puedes imaginar lo que hará contigo.
** Magda Gerber es educadora de la Primera Infancia, oriunda de Budapest, desarrolló RIE un método de educación, cuidado y estimulación infantil inspirado en las teorías de su profesora, la Pediatra Emmi Pikler. Encontré esta información en http://experienciasdeunamadrepikler.blogspot.com.es/2011/03/los-7-principios-claves-de-magda-gerber.html



También les quiero compartir algunos de los momentos deliciosos que se dan cuando nos permitimos observar y dejar hacer y acompañar, y de los que he tenido el privilegio de ser testigo con Daniel.





 Un video precioso exquisitamente filmado "Theo aprende a gatear"





Maestro de la postura:


 Otros enlaces interesantes: 

  http://www.veronicaanton.com/www.veronicaanton.com/Articulos_files/moverse%20en%20libertad.mp4
http://www.piklercatalunya.cat/
http://pastodeducandos.blogspot.com.es/2010/05/emin-pikler-y-el-instituto-lokcy.html 

viernes, 7 de junio de 2013

Derechos del nacimiento

Hoy 7 de junio se celebra el dia mundial de los derechos del nacimiento. Es otra más de esas fechas que no deberían existir porque que se respeten esos derechos fuera lo habitual. Mientras, es importante que revindiquemos, nos informemos y exijamos estos derechos.


10 Derechos del Nacimiento
Cómo nace y es recibido tu bebé es importante para su vida y la tuya.
Infórmate y decide

Derechos del Nacimiento

  •  Primero: El bebé tiene derecho al reconocimiento de su capacidad física y
    emocional, en su vida intrauterina y extrauterina y, especialmente, durante
    el tránsito entre ambas 

                     
  • Segundo: El bebé intraútero tiene derecho a que el bienestar emocional de su madre no sea alterado por un exceso y abuso de controles durante la gestación. (1)   
 



  •  
  • Tercero: El bebé y su madre tienen derecho a que se respeten el momento, ritmo, ambiente y compañía en el parto-nacimiento y a que el mismo transcurra de forma fisiológica. Un bebé y madre sanos tienen derecho a no ser tratados como enfermos. (2)



  • Cuarto: El bebé y su madre tienen derecho a intimidad y respeto antes, durante y después del nacimiento-parto. (3) 
 

  • Quinto: El bebé y su madre tienen derecho a permanecer juntos en las horas y días siguientes al nacimiento. Ninguna exploración ni estancia hospitalaria justifica la separación de ambos. (4)



  • Sexto: El bebé tiene derecho a disfrutar de lactancia materna a demanda, al menos, durante el primer año. A que durante su estancia en hospital se respeten los "10 pasos para una lactancia feliz" establecidos por UNICEF y la OMS y recomendados por la Asociación Española de Pediatría. (5) 
 

  • Séptimo: El bebé tiene derecho a ser atendido personalmente por su madre, como mínimo, durante el primer año. La madre tiene derecho a disfrutar del contacto íntimo con su bebé cuanto crea necesario.. 
 

  • Octavo: El bebé prematuro tiene derecho a permanecer pegado al cuerpo de su madre hasta que adquiera el peso y las condiciones optimas de salud. Ninguna unidad de neonatología es más saludable para el bebé que la piel materna. (6) 
 

  • Noveno: El bebé tiene derecho a permanecer pegado al cuerpo de su madre durante los primeros meses de vida extrauterina. El contacto cuerpo a cuerpo es vital para instaurar en el la seguridad y la confianza. 
 

  • Décimo: El bebé tiene derecho a que sean sus padres quienes personalmente tomen las decisiones y quienes para ello busquen la información relacionada con su bienestar. (4) 
 

El día 7 de Junio ha sido declarado por la Plataforma pro Derechos del Nacimiento y propuesto a la O.M.S. cómo "Día Mundial de los Derechos del Nacimiento".

Plataforma pro Derechos del Nacimiento
web: www.pangea.org/pdn